domingo, 21 de julio de 2013

vuelve borracho habiendo intentado borrar
vuelve borracho pero contento
por la noche contento
por los amigos

hay cierta música que hace sonreir mi alma
y cantar
cuanto lo siento
cantar
como si estuviera viviendo una historia gigante
así me gusta cantar
como un cantante

Y entonces todo mi cuerpo reclamando atención
toda la mugre flotando en el río
condena maravillosa
amo a esta gente
que bueno que saludé a la noche hoy
me voy a dormir ahora
antes de que pase algo
lo que sea
voy a apagar el mundo.

viernes, 19 de julio de 2013

Oh Nuestro toma los restos de mi dignidad y ten piedad de mi alma envilecida de mundo, deshecha en el dolor. Toma este alma arrepentida y sálvame al fín de toda esta incertidumbre enloquecedora, Santo, tomame en tus brazos y condúceme a mi rendición. Confieso haber descreído. Confieso haber estado manipulado por pasiones terrenas y bajas. Confieso haber buscado sentir el placer en la carne y en el exceso. Y hoy mis hermanos me dan la espalda, Padre, y no tengo con quien compartir esta pena tan grande, esta sensación de soledad devastadora que se extiende sobre todos los lugares adonde miro. Hay algo que me desgana y es mi mente que no para de hablar en silencio mientras existo. No puedo sentirme parte de nada, ni entender los comportamientos de la gente que me rodea. Y entonces aparece, como saliendo de un escondite podrido de mi interior, esa voz diabólica que habla suave y me dice: "..." Y es una tensión constante.
Dame un instante de paz. Siento que es el demonio que viene pisando mis talones, correteando, jugando con mis límites. Padre, pero un día voy a llegar al límite, porque lo tengo, porque mi cuerpo humano tiene un límite que difícilmente pueda controlar aunque ponga toda mi voluntad, toda mi fuerza de hombre, en detenerme. ¿Alguna vez sintió esa ansiedad? Ansiedad. No dejes caer en mi otra vil calumnia. Librame del mal, aléjame de mis enemigos... aléjame de los ojos de mis seres queridos. Estoy cercado en el fin... que pronto asimile como una queja. No me dejes caer en mis viejas pasiones de antes.
¿Sabes lo que se me pasa por la cabeza cuando descanso? Veo el rostro del deseo seduciéndome. Y no puede ser mi culpa mientras duermo. Sólo que quiero quedarme ahí, Salve Señor Mío, y sé que no debo desatender mi fé. Entonces me deshago en culpas. En fantasías que tienen sabor a culpa y cuerpo. Hay ciertos humores incontrolables ¿A usted no le pasa, Padre? ¿No siente en el cuerpo esas ansiedades? ¿No le reclama la vida algo diferente, más intenso en ciertos aspectos?

martes, 16 de julio de 2013

esto que escribo hace mucho tiempo ya o quizas hoy pero como podrías saberlo

El viento casi llueve sobre la avenida. Siento una tristeza aguda en esta noche joven y escribo como desde afuera, me imagino ojos leyendo mis desdichas, criticando mis formas, mis palabras. Ya no quiero tener más pensamientos oscuros.

Te soñé. Caminaba entre los árboles y podía ver entre ellos algunos fogones lejanos. Escuchaba tu voz que cantaba enérgica y decidida desde todos los frentes. No podía decir de donde provenía exactamente, pero sabía que habían grupos reunidos en esos fogones y que en cualquiera de esos grupos podía estar cantando esa voz  que no quería escuchar, hoy no, porque me quiero olvidar, porque ya no quiero tener más pensamientos oscuros, quiero iluminarme, encenderme y convidar. Pero no podía decir de donde provenía exactamente y me sentía ebrio y débil y confundido y quería correr para escapar pero desde todos los fuegos venía tu voz, detrás de todos los árboles te ocultabas en una inmensidad inocua y no quería que vieras mis pensamientos oscuros, toda la noche tendida sobre mi. Y me arrodillaba en el barro para detener esa cegera blanca e intensa que no me guiaba hacia ningún lado, quería limpiar mi corazón lastimado, sentir un abrazo cálido de madre o de hermano, quería perdonarme por mi pasado blando y amargo. Amargo.

Hace mucho tiempo te volviste una espera sonando todo el tiempo en mi cabeza. En cada silencio que me permití pude oirte como un fantasma torturándome desde la posteridad. Busqué todas las formas de olvidar. Me alejé,  escribí miles de poemas e historias evocando sutilmente, poéticamente, la tragedia que pesaba en mi alma. Luego, me mantuve ocupado. Me doy cuenta de que te hice presente en el mismo acto de evadirte,  te afirmé al negar mi furia, y así esquivé mi parte en esto.

oficio vitalicio herencia de mi gente que se revuelca en el pasto ensuciando esos limpios trajes

Esos cuerpos me humedecen. Será ese el motivo de mi próxima canción. Esos cuerpos me llaman con poderosa atracción, esos cuerpos que predican abrazo cálido. Sudan mis pudores a la sombra del patetismo. Es más grande el deseo que la mente. Y entonces concurren acuciantes todos los venenos de la moral de mi pueblo, corren a salvarme de mi propia desvergüenza, me avisan que mi deseo se parece demasiado al exceso, que los placeres que mi mente se promete no son más que una ilusión que debe terminar pronto. La realidad es humillación, debes entender, que necesitas al menos una cierta moderación para llegar a REY